Necesito apoyo con mi herramienta SAM

Que las herramientas SAM son un aliado para controlar nuestras inversiones en licenciamiento, nadie lo pone en duda, pero la realidad es que en la mayoría de las ocasiones los clientes suelen manejarlas para gestionar el software que saben que tienen, pero no para controlar aquellos aspectos del licenciamiento que no son conscientes de tener y que los fabricantes buscan en los procesos de auditoría.

Muchas organizaciones ya son conscientes de que los objetivos no se logran únicamente con la compra e instalación de una herramienta SAM comercial, y que además en muchas ocasiones estas pueden no ser la mejor alternativa. 

Así, nos podemos enfrentar a problemas como, por ejemplo, los siguientes:

• Es posible que tengamos instalada una herramienta y sin embargo esta no cubra todos los fabricantes y/o productos que tenemos desplegados.

• Las herramientas no leerán e interpretarán la documentación contractual, por lo que por defecto no tendrán en cuenta las cláusulas no estándar o las posibles particularidades y limitaciones de uso, más aún si estas cambian o se han renegociado con el paso del tiempo.

• Del mismo modo, no recogerán automáticamente aspectos críticos del negocio que tienen un impacto directo en el uso del software: prestación de servicios a terceros, cambios de estructuras en las organizaciones, etc.

Estas circunstancias pueden dar lugar a que los derechos de uso adquiridos no se correspondan con el uso real que estemos haciendo del software contratado. Solo una herramienta configurada y alimentada correctamente, que es objeto de monitorización y administración por parte de personal especializado, sirve como complemento para la obtención de datos de calidad en los que se pueda confiar.

Por consiguiente, un uso indebido de las herramientas SAM puede dar lugar a conclusiones erróneas que nos aporten una falsa sensación de seguridad cuando en realidad nuestra organización está expuesta a riesgos legales y financieros importantes.

De hecho, es frecuente que las auditorías concluyan con fuertes penalizaciones económicas incluso después del montaje de una herramienta SAM. Por este motivo, y según nuestra experiencia, una herramienta por sí sola nunca es suficiente.