Es un hecho que la mayor parte de los fabricantes no ponen fácil el control de sus licencias de software.
Así, resulta habitual que las competencias en materia de licenciamiento recaigan directamente en las áreas de IT de las organizaciones, a pesar de que la gestión de licencias suele tener un impacto transversal en otros dominios como el financiero o el legal.
La opción que se ha demostrado más eficaz hasta la fecha es contar con el apoyo profesional de expertos en licenciamiento de software, que sean completamente independientes de cualquier fabricante y que tengan un amplio conocimiento de los constantes cambios existentes en este ámbito.